viernes, 15 de noviembre de 2013

Etapas del Duelo



“La gran tragedia de mi vida era vivir tan mal pensando que vivía bien…”

Esta es una frase que dice un orador que asiste a un programa de 12 pasos para ayuda a familiares de alcohólicos, neuróticos, drogadictos…, el día de hoy, yo la utilizo para captar tu atención, me identifico mucho porque es parte de la historia de mi vida.

Soy hijo de un padre alcohólico en recuperación, fallecido en 2010. Crecí en un hogar disfuncional, desde mi niñez he estado rodeado de conflictos familiares y he afrontado diferentes pérdidas. La primer pérdida que marcó mi vida fue aproximadamente entre los 9 y 10 años de edad cuando mis padres se separaron. La segunda que me marcó fue la pérdida de un primo, el único de mi edad, con el que había crecido prácticamente, con el que jugaba, en los primeros años de la Universidad se fue al extranjero. Las otras pérdidas, fueron de amigos que se alejaron, se casaron, y relaciones que no funcionaron, pérdidas de empleos, pérdidas de objetivos académicos...

Las tres últimas pérdidas más recientes y que más me han afectado son: las pérdidas de mi padre a finales del 2010, quien tomo la decisión de terminar con su vida frente a mi casa en un jardín, terminó su martirio de un disparo. Seis meses después mi tío querido, hermano de mi papá, mi ejemplo, muere de un derrame, un año después la pérdida de una relación con la persona con quien tenía planes de matrimonio.

Ya que tengo tu atención, quiero hablar un poco de “El Duelo”. Según Wikipedia, el duelo es el proceso de adaptación emocional que sigue a cualquier pérdida (pérdida de un empleo, pérdida de un ser querido, pérdida de una relación, etc.). Por lo tanto todas las pérdidas requieren un duelo y es un proceso interno.

Según los psicólogos existen (unos dicen 5 y otros 7) etapas del duelo y las personas nos desplazamos a través de estas etapas de manera diferente. Las etapas son; CHOQUE, NEGACIÓN, CULPABILIDAD, MIEDO, IRA, DEPRESIÓN Y FINALMENTE LA ACEPTACIÓN DE LA MUERTE O LA SITUACIÓN.
A criterio muy personal diría que depende del tipo de pérdida, pues no es lo mismo, la pérdida de un empleo, que la pérdida de un padre, un hijo, un abuelo… pérdidas hay muchas, el tiempo en el que estemos en cada etapa depende de muchas circunstancias como la cercanía, la intensidad del cariño, conflictos sin resolver, entre otros…

Voy a describir brevemente cómo en mi caso, utilizando la referencia anterior de las etapas del duelo, fueron llevándose a cabo en mi persona cada una de ellas;

Un día de Septiembre de 2010, a eso de las 9 horas y minutos, al entrar a mi trabajo, recibo la llamada de un amigo de mi colonia, quien me pidió que me sentara para darme una noticia, me dijo que mi papá se había disparado frente a mi casa en el jardín y que prepara las cosas en mi trabajo para ir a mi casa….

Etapa de Choque: (Parecida a la negación) En palabras prácticas es la forma de reaccionar ante la situación.

En mi mente pasaron muchas cosas, lo primero que pensé era si mi mamá estaría bien, si mi papá aun estaría vivo, si podría despedirme de él, ¿por qué lo hizo?... Cuando llegue al condominio de donde vivimos, me tope con ambulancias, personal del Ministerio Público, los vecinos que nunca faltan, amigos y familiares. En el mencionado jardín vi una sabana color celeste tapando el cadáver de mi padre que yacía ahí. Mi reacción fue: bueno ya murió hay que ir a ver si es él… lo confirmé y lo primero que dije fue que había que prepararse para realizar las diligencias de la funeraria y todo lo que fuera necesario, en ese momento tome las riendas de la situación (estaba en shock, no lloré, no grité, no nada…) me desenvolví aparentemente normal, aparentemente muy fuerte, sin expresar emociones.

Con la familia tomamos las decisiones necesarias respecto a los trámites de funeraria y esas cosas, a mí me tocó ir a la morgue a esperar que realizaran la necropsia, posteriormente reconocer el cadáver de mi papá. Ya en la funeraria, me tome unos diez minutos, me hinqué frente al ataúd, abracé una foto de él y en ese momento llore, le dije que lo perdonaba, que se fuera con Dios…. 10 minutos donde lloré. (Únicamente, esos minutos, después no exprese nada más).

Etapa de la Negación: Esta etapa diría que es la más dura. Es engañarte a ti mismo y los demás de la realidad de tu entorno.

Después de los 9 días cuando ya estaba solo fue cuando comencé a experimentar la negación. Cuando dormía soñaba con mi padre, lo soñaba dándome mensajes, contento, sufriendo. Cuando despertaba a media noche y miraba su cuarto cerrado me preguntaba si estaba ahí, aunque conscientemente sabía que no. Otras veces (sobre todo los primeros días) cuando despertaba, si es que dormía algo, de momento pensaba que todo lo que pasó fue un sueño.

Cuando regresaba del trabajo y me tocaba que encarar la realidad de enfrentar mis sentimientos, lo primero que veía era el carro de mi papá parqueado afuera y era un shock tener que pensar en él y saber que me tenía que decir que él no estaría adentro de la casa. Algunas ocasiones me pasó que estando en la calle y miraba algún carro parecido al de él, tenía la impresión de verlo. Muchas veces en mi propia casa tenía la esperanza de que en espíritu llegara a visitarme y decirme algo, quería sentir su presencia, pero no sentía nada. Negaba que ya no estuviera más.

Etapa de la Culpabilidad: Es sentir responsabilidad por el resultado, sentirse responsable directamente de lo que le sucedió a la otra persona.

Esto me sucedió en varias ocasiones, al principio, en medio de mi duelo, incluso aun quiere en ocasiones circular en mi mente… (Esto es normal, hay que permitir sentirlo, pero no somos responsables de los sentimientos ni de las decisiones de los demás, cada persona es un ser único y responsable de sus actos, emociones y sentimientos.)

Crecí en un hogar disfuncional, tuve todo lo que quise, amor, cosas materiales, en fin. Pero los problemas familiares estaban a la orden del día, crecí entre alegatos, faltas de respeto, agresiones físicas, verbales, psicológicas, aunque no fueran directamente a mi persona (las dificultades de mis padres me afectaban). Por todo esto yo generé ciertas reacciones en contra de mi padre.

Él era una persona de mucho valor, una gran amigo, buen papá, amoroso, carismático… pero complicado de carácter, cuando crecí, mi héroe se derrumbó puesto que me di cuenta de sus grandes defectos, como todo buen alcohólico. Un día antes de su fallecimiento, como cosa normal, hubo una discusión entre mis padres, en desacuerdo con la actitud machista de mi papá intervine y recuerdo que le hice una cara con gestos de desprecio, rechazo, hasta odio, con el ánimo que reflexionara sobre las cosas hirientes que le decía a mi madre.

Al día siguiente a las 9 y minutos recibí la trágica llamada, mi papá se había disparado…. Culpa: ¿Hasta qué punto es nuestra responsabilidad? ¿Hasta qué punto nos vamos a castigar?.

Etapa del Miedo: El miedo o temor es una emoción caracterizada por un intenso sentimiento habitualmente desagradable, provocado por la percepción de un peligro, real o supuesto, presente, futuro o incluso pasado. Es una emoción primaria que se deriva de la aversión natural al riesgo o la amenaza. (Wikipedia)

Todo está en nuestra mente y hay que encarar estas emociones para poder superarlas, es importante hacer un examen de conciencia y preguntarse ¿A qué y porque tengo miedo? ¿Es miedo a una amenaza real o es supuesta, está en mi mente o es real?
…cuando dormía en mi cuarto sentía la presencia de alguien, tenía miedo, sentía que era Satanás en persona, ahí en mi cuarto. Me daba miedo incluso ir al baño, me daba miedo dormir, pues tenía pesadillas, tenía miedo de abrir los ojos a media noche y ver al Diablo… A los 6 meses de la muerte de mi padre, falleció mi tío, hermano de mi papá. Otro funeral, en la misma funeraria que mi papá…. ¿Por qué a mí? ¡Llegue a pensar que de verdad Satanás me estaba acechando a mí! ¡A mi familia! Temía que mi pareja se terminara suicidando como mi papá (era neurótica), temía no afrontar bien la vida, miraba cosas.

Al llegar a Ala-Non (grupo de 12 pasos para ayuda a hijos, familiares o personas que han convivido en hogares disfuncionales), me di cuenta que esos miedos eran supuestos, que no solo a mí me pasaban esas cosas y que con ayuda podría continuar.

Etapa de Ira: (Furia, enojo, Irritabilidad) Dicen los Psicólogos que es una etapa muy importante puesto que es el momento donde afrontamos la negación y se empieza aceptar la pérdida.

Mi viejo y yo nos queríamos muchísimo, pelábamos, teníamos puntos de vista distintos, pero el amor que él y yo nos teníamos era poco común, éramos amigos, mi papá me adoraba, yo era sus dos ojos. Y entonces ¿por qué no se despidió de mí? ¿Por qué no me dejó una explicación? ¿Por qué me quiso dejar este cargo de conciencia? No lo voy a permitir, yo no voy a cargar con esto, fue su decisión, no fue la única vez que peleamos, no era para tanto, voy a salir de esto. Y Dios; primero mi papá y ahora que me acerco más a mi tío y él a mí, hoy sí se te pasó la mano. ¿Qué quieres de mí Dios, no te bastó con uno? Me disgusté con mi Dios un tiempo.

Etapa de la Depresión: La psiquiatría la describe como un trastorno del estado de ánimo y su síntoma habitual es un estado de abatimiento e infelicidad que puede ser transitorio o permanente. Hace referencia a un síndrome o conjunto de síntomas que afectan principalmente al estado de ánimo: la tristeza patológica, el decaimiento, la irritabilidad o un trastorno del humor que puede disminuir el rendimiento en el trabajo o limitar la actividad vital habitual.

…Según yo, no iba a permitir que me entrara la depresión, tenía que ser fuerte por mi madre, ahora yo tenía que tomar el lugar del hombre de la casa, no me iba a dejar deprimir, además no debía, no fue mi culpa. Mi carácter cambió mucho, dejé de tenerle tolerancia a los demás, no me dejaba más de nadie, ADIÓS PACIENCIA. ¿Por qué tengo que comprender yo a los demás? con lo que me paso, trabajo, estudios, gastos, que me comprendan a mí. Me volví una persona irritable, poco tolerante.

Muy en mi interior sentía que me habían dejado solo, abandonado, a pesar de que ya era yo un hombre, aún dependía emocionalmente de mi papá, aun que mi padre ya era un hombre de edad avanzada, sabía que si tenía algún problema ahí estaba él, era un hombre con un valor increíble y gran apoyo en las dificultades… ¿ahora qué? Yo estaba deprimido y no lo sabía hasta ahora.

Finalmente, aceptación de la muerte o una situación: (Me refiero a situación debido a que hablamos al principio de pérdidas y hay de todo tipo).

Podemos decir que hablamos del duelo resuelto cuando se ha completado un duelo, esto quiere decir que es cuando tenemos la capacidad de recordar al fallecido sin sentir dolor, cuando hemos aprendido a vivir sin él o ella, cuando hemos dejado de vivir en el pasado y podemos invertir de nuevo toda nuestra energía en vivir.

El día de hoy te digo a ti que lees esto, he superado mi duelo, he superado esas noches de dolor, de tristeza, de la sensación del abandono, hoy puedo hablar de mis duelos, hay algunos que tengo que ir superando aun, debo de trabajar mucho en mí. Te quiero decir algo, no estamos solos, esto también tiene que pasar, pero si confías en un poder superior a tu persona (en mi caso es Dios) y sientes que ya no puedes, sientes que la tristeza, la rabia, la soledad te consumen, entonces pídele a él; fortaleza y sabiduría, el apoyo ya lo tienes aquí, habemos personas que ya pasamos por esto y yo soy uno más. Al escribir estoy trabajando en mí, tu también me ayudas, comparte esta lectura con alguien más, ese es el objetivo.

Lamento mucho si estas pasando por esto, pero te digo, cuando esto termine, verás la luz, todo va a pasar, pero debes de trabajar en lo que sientes, tener paciencia, espero que este testimonio te ayude un poco y no está mal sentir lo que sientes, es parte de tu duelo. Recuerda la recuperación es muy personal, el tiempo de las etapas y el orden puede variar pero al conocerlo es más fácil sanar.

La gran tragedia de mi vida era vivir tan mal pensando que vivía bien… todo esto que te expresé antes no lo entendía, pensaba que mis cambios de humor y mis constantes pensamientos obsesivos eran algo normal por todas las cosas que me pasaron y que yo era la victima de las situaciones, ahora sé que lo normal es tener emociones, que debo de expresarlas de forma sana, confiando que mi poder superior me devolverá el sano juicio, para encontrar paz, serenidad y alegría.

Vive un día a la vez, lo demás vendrá solo.



Nota: No hay nombres y las fechas son inexactas para proteger el anonimato de quienes puedan sentirse afectados, el objeto es ayudar a los demás.


3 comentarios:

  1. Dedicado a una familia que esta pasando por un duelo, con cariño y apoyo.

    ResponderEliminar
  2. Wow victor no paro de llorar...estoy sin palabras. Solo quiero que sepas que te quiero mucho y apesar de la distancia yo pienso mucho en ti y te extrano bastante....ojala nos podamos ver pronto. Cuidate mucho y recuerda todo lo que te dije ok? Love you Victor

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Querida Isabel, la vida no es complicada, somos nosotros los que nos la complicamos, nuestras decisiones son las que van a influir en nuestra vida, la forma en que afrontamos las adversidades, todo es cuestión de actitud, si la vida te da un portazo y te rindes y lloras, de esta manera la sigues viendo, pero si después de deprimirte, buscas la formar de seguir adelante, vuelves a sonreír y a ver las cosas lindas. Cuando sentimos que solos no podemos, hay otras opciones, solo tenemos que ser humildes para aceptar un poco de ayuda. Te quiero mucho.

      Eliminar